Miedo a la perdida, al rechazo, al monstruo que hay bajo tu cama o en el armario, el ''tiburón'' que te espera en la playa...
La mayoría de esos miedos son fruto de nuestra imaginación, que es alimentada por las películas e historias de miedo que nos rodean constantemente. Las personas que tienen mucha imaginación son capaces de asustarse a si mismos imaginándose en situaciones de peligro, eso hace que los niños lo pasen mal a las noches, que no duermas bien o que después de una peli de miedo veas cosas extrañas.
Total, el miedo es algo psicológico, piénsalo:
¿Merece la pena asustar de algo que es inexistente?
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